lo importante es saber descansar

Si no fuera porque es más fácil discutir sobre un relajo de un partido de fútbol o de lo que pasó en la telenovela con más raiting, o ir y fumarse un porro y olvidarse, o putear por el bondi, el auto o la suegra... O sólo porque hay que laburar o laburar!... Pensar sobre cualquier otra de las chiquicientas nimiedades que obviamente son más cómodas de intercambiar entre un grupete de homo sapiens, creo que a muchos más nos atraería ponernos a charlotear sobre cosas que agregarían contenidos más trascendentes a nuestras vidas. Aunque sea en un tono civilizado, de esos de entre cañas, birra o lo que sea, sanamente trasnochados, en donde se dé. Entre sabidurías e ignorancias. Con dignidad. Procurando destaparar nuestros ojos y mentes de tanta interferencia comercial que nos mantiene miopes sobre asuntos que creo son muy relevantes. Para saber más o menos qué es importante, en mi opinión, mejor empezar por algo más fácil, como identificar a la estupidez...

Parece una probabilidad muy lejana por ahora. Limpiar así la mente no se le hace fácil a nadie en esta época. Y para muchos justamente es lo contrario. Es perder el tiempo o es llenarse el cerebro de complicaciones. O directamente no es limpiarse, sino algo muy lejos de la sanidad. Se prefiere y consume el tragar vacíos, para poder "descansar" la cabeza. Vaciarse. Volcarse a lo nimio. Evadirse en las últimas horas de ocio antes de retornar a la maquinaria diaria. Le sea ésta a uno funcional o no, placentera o inbancable. Parece preferible informarse sobre la nada, y mirar cíclicamente repeticiones macabras de las miserias humanas, entre publicidades de lo innecesario.

Pero ta, "es lo que hay", dicen. Y también dicen que uno no puede cambiar al mundo. Entonces mejor me dejo de boludeces, así duermo como para poder encarar el domingo. Ese día que se destinó para el descanso de todo lo demás...